La otoplastía es una intervención que sirve para corregir la forma y/o el tamaño de las orejas, y/o el ángulo que forman con el rostro. La modificación más común es la que se realiza sobre las denominadas "orejas en asa". Este defecto, que normalmente es de nacimiento, conlleva problemas psicológicos en el paciente, lo que motiva la operación, la que suele realizarse a partir de los 4 años. Por lo anterior, esta patología es cubierta por el sistema previsional de salud en la mayoría de los casos. Las cicatrices no se ven a simple vista ya que se ubican retroauriculares (detrás de la oreja) y a veces algunas preauriculares (escondidas en los surcos y pliegues).  Entre 7 y 10 días postoperatorios el paciente puede regresar a su actividad normal y   puede realizar ejercicio físico después de los 30 días aproximadamente.